¿Quién no tiene ahora mismo en su entorno más cercano a alguien con gripe, con un resfriado, con un catarro o con síntomas de estar a puntito de caer? Si no es tu vecino, es tu compañero de trabajo y si no los amiguitos de tus hijos… estamos rodeados.
Muchas veces no somos conscientes de que tenemos a nuestro alcance una de las medidas preventivas más eficaces para hacerle frente, y sí, tiene mucho que ver con lo que comemos: una alimentación saludable junto unos hábitos de vida adecuados son clave en este papel. Podemos hacer una buena barrera frente a todos estos intrusos y esquivar esta ola.
Si seguís leyendo veréis que es más fácil de lo que creéis y más importante aún, lo tenemos a nuestro alcance.
Con estas bajas temperaturas apetece elegir un plato caliente, “de cuchara” que decimos, y qué mejor oportunidad que esta para comer con más frecuencia legumbres. Da igual cuál de ellas, las legumbres en si tienen un gran valor nutricional, son fuente de proteínas vegetales, aminoácidos y otros nutrientes esenciales, además de alto valor biológico, lo que quiere decir que nuestro organismo está preparado para la asimilación de esta fuente de nutrientes. Cómo podríamos asegurarnos de esto último: combinándolo con cereales acabaríamos de hacer un plato completo y no tendríamos que preparar un segundo. Os ponemos un par de ejemplo, añadirle arroz a los garbanzos o también mijo a las lentejas.
Un buen postre para completar las legumbres junto al cereal podría ser una fruta con un alto contenido en vitamina C, como pueden ser los cítricos (naranja) o por ejemplo un wiki, para ayudar a fijar el hierro que nos aportan en este caso las legumbres.
Los caldos o sopas como primer plato son una buena elección para complementar una cena, ya que algo caliente calmará nuestro apetito para no acabar haciendo una ingesta muy copiosa si llegamos con hambre a casa y evitaremos ingerir una cantidad excedida antes de acostarnos y, por otro lado, contribuirá a nuestra hidratación, uno de los factores más importantes a tener en cuenta para cumplir nuestro objetivo. Beber agua es importante para que nuestro organismo funcione, la recomendación esta en llegar a los dos litros diarios, unos ocho vasos aproximadamente. Con infusiones y caldos podemos completar este objetivo.
Si queremos asegurarnos de que nuestros requerimientos de vitaminas y minerales los estamos logrando con éxito para encontrarnos bien y con energía, debemos consumir fruta y verdura a diario. Cinco raciones entre ambos grupos para ser más exactos. Podemos aprovechar los alimentos frescos de temporada y podemos o bien cocinarlos o servirlos en forma de ensalada, al gusto de cada uno.
Añadir ajo a nuestros platos nos ayudará a la hora de combatir un resfriado gracias a sus propiedades antisépticas además de darle su toque gastronómico.
Miel: la Organización Mundial de la salud (OMS) define la miel como un emoliente, que es una sustancia que alivia la irritación en la boca o la garganta formando una barrera protectora. La mezcla de miel, jengibre y limón se complementan muy bien y constituyen un estupendo jarabe para la tos, caramelos para el dolor de garganta y complemento para la prevención de resfriados.
La miel tiene muchos atributos saludables, pero también es alta en fructosa, alrededor de un 53%. Cada cucharadita de miel tiene cerca de 4 gramos de fructosa, lo que quiere decir que puede exacerbar la resistencia a la insulina pre-existente y causar estragos en su cuerpo si se consume en exceso.
En invierno y primavera, la recurrencia de estados gripales y de inflamaciones de las vías respiratorias es el resultado de un sistema inmunitario deficiente. Los hábitos saludables como tener alimentación equilibrada, no fumar, protegerse de la contaminación ambiental, combatir el estrés, dormir lo suficiente y evitar el sedentarismo y un ejercicio físico moderado como caminar una hora seguida al día puede ser una buena para reforzar nuestro sistema inmunitario. En Clínica Nutriestética podemos ayudarte con cualquiera de esas problemáticas (deshabituación tabáquica, insomnio, estrés…).
Esperamos que te hayamos proporcionado información sobre algunos alimentos que pueden ayudar a fortalecer tus defensas para que combatas los incómodos síntomas de esta enfermedad lo más rápido posible.
Y recuerda, en caso de duda, ponte siempre en manos de un profesional de la Salud.
Ana Isabel Pérez.
Nutricionista.
Clínica Nutriestética.